En el Consejo de la ciudad capital
Hace un tiempo una organización de las que integran el colectivo "Infancia en Deuda" emitió un comunicado por los medios criticando al programa "Abrazar" por someter la mirada de derechos a una tarea de voluntariado sin explicar las críticas al programa y no adentrarse a enriquecer al menos el debate poniendo en cuestión algunos puntos en los que podrían estar en desacuerdo.
Esto ocurría pocos días después de haberme inscrito para conocer este programa que me llamó mucho la atención. Por lo que pudimos recabar del mismo, viene a ser un perfeccionamiento del programa "referentes afectivos comunitarios" que data del 2012, y que buscar suplir la carencia del vinculo humano a chicos institucionalizados. Con lo referido no queremos decir que el arco institucional no tenga afecto para con los niños pero con el establecimiento del mecanismo se busca ofrecer "una figura de apoyo referencial y de sostén emocional que acompaña al niño, niña o adolescente, que identifica sus preferencias, necesidades y lo asiste en el ejercicio de sus derechos. Implica la responsabilidad de sostener a ese niño, generar una relación de afecto con él, formar parte de su red social, devenir en una figura de confianza acompañándolo en la construcción de un proyecto de vida adulta con miras a singularizarlo y promover su desarrollo integral, respetando su identidad, historia y vínculos." Con esta definición amplia de "referente afectivo" el programa busca que los niños cuenten con un apoyo referencial significativo que los acompañe durante el tiempo en que se encuentren institucionalizados, con la posibilidad de extender el mismo. En palabras del cuadernillo del taller de capacitación obligatoria, el programa se atiene al paradigma de protección integral, "el Programa Abrazar se constituye como una estrategia para la restitución de derechos de niñas, niños y adolescentes sin cuidados parentales" (Taller de Capacitación Obligatoria TCO Progrma Abrazar, Consejo de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, p 27).
Nuestro ejemplar del Programa Abrazar
¿Cómo poder explicar en pocas palabras mi rol en infancia y las competencias que he adquirido para hablar sobre esto? Soy acompañante terapéutico, recorro hogares hace diez años, he sido operador en la Fundación Manos Abiertas (conocida dentro de las que hay), trabajo con discapacidad, soy voluntario actualmente en una escuela que dicta golf a personas con discapacidad, he tenido experiencia judicial en derechos para personas con discapacidad.... y un montón de cosas más que están esparcidas a lo largo de estos años comentándoles historias de un proceso de transición al pleno cumplimiento de la 26061...
Al escuchar las respuestas a mis preguntas por parte del personal que atiende el programa salieron algunas consideraciones. Este dispositivo pretende ayudar a establecer un vínculo de contención extra para el infante y en cierta medida ser un referente para cuando salgan del proceso de institucionalización. El protocolo según lo explicado se atiene a las directivas que emanan de Defensoría (ellos llaman así a dependencias comunales donde hay equipos técnicos multidisciplinarios), donde el referente afectivo se encuentra bajo un encuadre de trabajo donde tiene un cierto grado de libertad, todo supervisado por las instituciones pertinentes al caso. Es decir, el referente afectivo en una primera instancia asiste al infante en alguna actividad para lograr el vínculo y a partir de allí se comienza la interacción dentro del encuadre institucional donde está contemplado el refuerzo del vínculo (entiéndase como más horas de interrelación) previa aprobación del arco institucional.
Al preguntarle a una referente afectiva sobre su noción legal me manifiesta que no tiene idea y ésta según mi visión es una falencia del dispositivo ya que permitiría enriquecer el aporte del voluntario al sistema de protección integral, es decir, capacitando al voluntario sobre la nueva visión de derechos de infancia y dotarlo de conocimientos del caso podría ayudar a:
1) Conocer sobre el sistema de protección integral en su esencia
2) Ser promotor de esta nueva concepción de derechos acelerando el proceso de transición hacia el cambio de paradigma
3) Ofrecernos espacios donde las "lagunas jurídicas" nos obliguen a reflexionar sobre medidas a adoptar según el caso
4) Dotar al voluntario de un mayor grado de compromiso buscando que sea un referente activo
5) Ampliar las puertas a esos compartimentos estancos ofreciendo al infante una escucha activa por parte de personal que no conocía al actual sistema de protección de derechos
En resumidas palabras y para epresar de manera mas concisa la crítica podría decir:
1) Sería conveniente capacitar a los referentes en aspectos de derechos de infancia y ofreerles un resumen de las instituciones que atienden aspectos de cada caso
2) Según lo entendido el referente afectivo se atiene a seguir las recomendaciones de "Defensoría" dando a esta institución una potestad de "Autoridad de Aplicación Local" que toda queja queda siempre a instancia de la misma institución
3) Teniendo en cuenta lo mencionado en el punto 3 y recomendando el punto 1 se enriquecería el abordaje de caso ampliando fronteras en el ejercicio de derechos de los chicos institucionalizados.
Una política de Estado basado en el voluntariado involucra a participar a una ciudadanía con ganas de ayudar, a la que tenemos que dotar de esta nueva visión de derechos, ampliando nuestras fronteras de conocimiento y poder perfeccionar un programa con el ejercicio del mismo y no someterlo a una rutina más de una dependencia local.
Primera instancia para ser referente afectivo
Consideraciones finales
Como mencionamos al comienzo del post no es positivo criticar a un dispositivo cuando no se lo conoce, al menos por parte de quienes lo implementar, y llevarse por la interpretación de un artículo periodístico. Dejando de lado las simpatías partidarias tenemos que demostrar a la sociedad un ejemplo de tolerancia y comenzar a crear espacios centrados a mejorar la calidad de vida de nuestra infancia.
Una jornada donde se conmemoró el nacimiento de René Favaloro, un gran profesional que aportó un gran avance al corazón de la humanidad y los seleccionados por la bicameral se presentaban para hablar sobre el régimen de responsabilidad penal juvenil, por nuestra parte nos adentramos a este sistema de abordaje voluntario donde queda bien demarcado la demanda que se necesita cubrir:
34 chicos mayores de 10 años
3 grupos de hermanos
12 situación de discapacidad
Estos chicos esperan un referente afectivo y la base de inscritos no logra satisface esta demanda, es por ello que se lanza la convocatoria en la cual el proceso de selección pasa por varias instancias y no es improvisado el sistema de abordaje.
Una propuesta que desafía nuestro modelo de pensamiento en estas innovaciones que nos permite el andamiaje legal en vigencia. Es curioso que de los seleccionados por la bicameral ninguno se haya acercado al menos para mencionar su interés por el tema, pero por ser curioso no nos sorprende al conocer como se maneja el actual sistema institucional...
En tiempo de bandos enfrentados por colores y simpatías partidarias que parecen irreconciliables, en el medio está una infancia postergada por años, donde se quiere imponer una Defensoría simpatizante de un modelo de gestión que cuando estuvieron en el poder no hicieron mucho para que saliera.
Atrás quedaron las palabras de una dependencia con libertad de criterio partidario y que se aboque a una estrategia para encarar una problemática de vieja data que puso a todo el sistema en crisis.
Es tiempo de dejar los prejuicios y dotar a una Defensoría, la primera en la historia del país, de un liderazgo independiente de colores y con libertad de criterio, cosa que lamentablemente no logra satisfacer la oferta de la bicameral. Y mientras esperamos el desenlace de una historia de pujas palacezcas, continuamos haciendo historia siendo protagonistas de este proceso de transición en donde la infancia se encuentra ya pasando medio año de otro sin defensor a la altura de las circunstancias...
