La agenda uruguaya

En un año electoral también estamos en campaña

Estar disertando en el Congreso Nacional de la República Oriental del Uruguay sobre mi experiencia personal de vida dedicada a proteger y promocionar los derechos de infancia en un entorno de Paz es para mi persona el cierre de un ciclo que comenzó a gestarse luego de la escandalosa designación de la bicameral del Congreso argentino que perpetúa un modelo institucional que nos dejó en una crisis sin precedentes en la historia del país. Si bien esta proposición  de los representantes tiene que ser avalada por el pleno de las cámaras, donde se dificulta su elección debido al sesgo ideológico del pleno de sus elegidos (recordemos que la bicameral propone que la totalidad de los aprobados conformen una nueva estructura que demuestra la conformidad absoluta), es el cierre de un capítulo que nos expuso el trato del Congreso a un tema del que se postergó tanto tiempo y que se quiso apurar sin conocer lo que sucede fuera de las paredes del palacio legislativo...

Dicen que las casualidades no existen, y en materia de infancia la región ha obtenido una oportunidad que por primera vez se da a nivel planetario: el flamante presidente del Comité de los Derechos del Niño recae sobre un uruguayo: Luis Pedernera . La infancia de Sudamérica tiene una oportunidad de ser vista por el mundo, siendo que la Convención de los Derechos del Niño es el documento con mayor numero de adherentes en la historia de los acuerdos globales. Y que nos presentemos en el Congreso de Uruguay en esta época es una clara conjunción de factores que ayudan a visibilizar una problemática de la que somos protagonistas.

Siendo el "candidato 68" (este número es debido a la cantidad de candidatos que han sido seleccionados al concurso público para la designación del Defensor Nacional de los Derechos del Niño donde, dentro de los bandos ideológicos en pugna sería mi postulación como "el último orejón del tarro") nos da la independencia necesaria para elaborar políticas apartidarias y participativas que posibiliten espacios de paz, y nuestra experiencia siendo en algunos casos los pioneros en la aplicación de la ley 26061 (una de completas e inclusivas desde el marco jurídico siendo ejemplo en la región) nos posibilita a diagramar alternativas eficaces a aquellos ·cuellos de botella" donde quedan todas las causas que o pueden ser vistas desde un escritorio...

Al cierre de esta publicación nos llega una denuncia de repudio via Whatsapp sobre una manifestación de los grupos abortistas que sin lugar toman el escándalo como consigna de visibilización de su causa, generando reacciones que alteran la paz de una sociedad que está sufriendo numerosos embates contra la infancia y que alertan sobre la imperiosa necesidad de un Defensor Nacional de los Derechos del Niño capaz de liderar un proceso sin sesgo.

La imagen duele y lo que nos apena más el silencio de los elegidos por la bicameral permitiendo con el mismo que la indifere3ncia y desidia hacia la infancia continúe...

La agresión como forma de expresión

Por estos días numerosos casos de abuso infantil sacuden la opinión pública y los medios nos presentan a los mismos como una secuencia de esta crisis que venimos mencionando hace años: el caso de un médico del Garraham, el caso de un enfermero pediatra de Moreno y el de una profesora de Santa Fe son las muestras de los avasallamientos de los derechos de los niños por parte de los adultos en los cuales el letargo de aquellas personas que pertenecen a instituciones de gran porte en el país (muchas de las cuales ahora forman parte de los seleccionados para conducir la Defensoría) no vislumbran una crisis de liderazgo que necesitamos resolver.

Verdes... Celestes...

¿Se podrá ser imparcial habiendo militado en uno de los bandos?

Necesitamos demostrar que hemos superado los fanatismos, aquellos que buscan hacer prevalecer ideas contra aquel que piensa distinto, y someternos a una ley que es clara para, a partir de allí, plantear los escenarios emergentes que piden la necesidad de aggiornar el marco jurídico para contemplar casos que necesitan de una atención adecuada. Pero en paz, demostrando ser una sociedad inclusiva y tolerante.