El imperio de las mentiras

En carnaval se les va cayendo la máscara...

Por estas horas el primer mandatario ruso, ahora invasor, calificó a occidente como el impero de la mentira...

Que la mentira sea parte del relato por estas pampas ya es una costumbre arraigada en la casta política acompañada de una claque que se puede mencionar fanática a tal punto de negar hechos con pruebas...

El trasvasamiento generacional en las instituciones abocadas a la infancia no se ha dado desde el siglo pasado, bah... creo que nunca se dio y solo los casos de ello se puede decir un trasvasamiento familiar. Tal vez por ello esto de internet y su migración de lo analógico a lo digital motivaron a  delegar en consultoras de poca monta y mucho menos experiencia especializada el encargo de cuentitos "aguas arriba" y de relato "aguas abajo" buscando con ello llevar pan a la mesa y vendiendo sus valores tal como fueron acostumbrados...

El empoderamiento ciudadano en la era de la información ha mostrado a lo largo de estos años una lógica y lenguaje disímil, buscando comprender los casos de éxito viral que pueden mover montañas y los de escándalo que no concentra el interés de la ciudadanía. Es así que podemos mencionar como éxito al YouTuber (ya es una profesión y con buena paga) Maratea y sus causas benéficas, y como de escándalo dos ministerios nacionales (como el de Ambiente con los incendios en Corrientes o como el de Salud con sus innumerables escándalos) que si bien tienen una presión y llamado a la acción desde los medios de comunicación la política se encarga de aplacarlos y que estas gravedades institucionales no lleguen a buen puerto...

Si hablamos de ministerios envueltos en manejos turbios lo es peor si organismos encargados de velar por su correcta acción estén más inmerso en los escándalos.

Es así el del nacimiento de la primer Defensoría de Niñez y Adolescencia de la historia de la Republica Argentina, organismo que busca establecer un relato frente a nuestra exposición de años acerca de gestiones ineficientes, connivencias tapando vulneraciones de derechos e historias de vida cercenadas por una institucionalidad carente de afecto por el prójimo...

Y las mentiras continúan, las publican como globos de ensayo acerca de sus registros para establecer un relato y agarrarse de algo al menos que tenga asidero y no como las propaganda de inicio de actividades de una Defensoría que dejamos expuesto como una gran mentira y en la que la casta de representantes de la bicameral encargada de velar por su correcto funcionamiento se llamó a silencio porque no les quedaba otra ante la prueba y análisis que presentamos...

Comencemos con los más chiquitos mostrando el ejemplo que una sociedad con esperanza es posible. Sé que su frialdad consecuencia de tantos años institucionalizados viendo una realidad producto del "equilibrio" entre actores en juego los obligan a pensar de la manera en que lo hacen, diciendo "es así", resignando un futuro. Ojalá que ejemplos de lo que es capaz el ser humano en guerra puedan incentivar a querer ser mejores personas y de esta manera abrir un espacio de inclusión para poder contemplar voces de mejora...

La mentira tiene patas cortas. Y muestra de ello son estas líneas que tienen prueba apenas mencionan una gestión inexistente.