Cerrando febrero

Última semana de febrero

Sin la caja ni el aparato de amigos y subordinados con que cuenta la Defensoría militante por los derechos de la Niñez y Adolescencia Nacional que simpatizan con ellos, los números de vistas de nuestro blog no son para desconsiderar en lo absoluto.

Somos conscientes que a la infancia se le presta poca atención, quizá debido a nuestra mirada adultocéntrica, quizá a nuestro presente en un eterno caos de incertidumbre que no nos deja pensar a futuro ya, o tal vez por otros factores que no tenemos en cuenta. La realidad de mi experiencia institucional fue ver una desidia estructural por parte de una gran mayoría en la cual la casta política supo hacer su juego con tranquilidad.

 

En la actualidad algunos cimbronazos de protagonistas en la red hacen mella en la política nacional, haciendo notar que la cultura que se ha venido conformando desde el retorno de la democracia exacerbando la viveza criolla argentina va en decadencia evidenciando la capacidad de la dirigencia política nacional en su labor.

El caso más emblemático lo dio por estos días un muchacho quien se puso al hombro una campaña para combatir los incendios en la provincia de Corrientes haciendo notar la mezquindad entre dirigentes y como se ha tomado al Estado como un bastión de sometimiento para quien no comulga con su ideología...

Un buen motivador para un paper...

En la era de los influencers y su capacidad de llamado a la acción notamos a un Estado en retroceso con una carga de militantes que no justifica su función. Si bien esta tendencia no es únicamente en la República Argentina, podemos mencionar que en nuestro país la confluencia de otros factores como lo son la incapacidad de revertir momentos de bochorno defendiendo lo indefendible, escudado en un ejército de reserva de adicto a planes sociales quienes van teniendo conciencia de su independencia, lo colocan al actual gobierno frente a una fragilidad de gobernabilidad como nunca antes se ha visto en lo que va del milenio. Y por estos días con la externalidad de una posible guerra a escala global frente a una indecisa política exterior demostrando lo inútiles que son el el campo interno y externo estamos frente a una "tormenta perfecta" carente de liderazgo dentro del oficialismo y a oposición, oportunidad para la emergencia de nuevos actores con algún grado de credibilidad.

Un 2022 que en sus comienzos muestra unos nubarrones sacudiendo un sistema social en crisis...