Una adolescente aprendiz de asesina

 Por estos días quienes nos interesamos en temas de infancia nos sorprendimos con el caso de un kiosquero asesinado por una pareja de delincuentes de la cual una adolescent3e que dice estar embarazada participa: 15 años...

Casi tantos años como la ley nacional 26061 esta niña (acepción que se le da a las personas hasta los 18 años según el marco legal en vigencia) nos invita a reflexionar sobre el marco institucional que no ha cambiado desde el siglo pasado y que ha conformado a una clase de dirigencia acomodaticia que ha vivido de la infancia hasta estos días...

Senectas señoras que ya no recorren las calles que se han acostumbrado a reuniones como las antiguas damas de la beneficencia y que las mismas han evolucionado para sr mas alejadas aún via Zoom, y una claque adiestrada e insensible que va siendo entrenada desde chiquitos...

Autocrítica de una juventud crítica a su misma dirigencia

El cansancio social se ha manifestado a pocos días de las elecciones generales nacionales para renovar miembros legislativos, proceso que ofrece pocas alternativas serias de gestión y casi con la resignación de ser rehenes de una clase dirigente a la que le importa poco la historia de los arrabales...

La Matanza parece hacerle bien a su denominación y este distrito hoy es la muestra de la política que supimos conseguir. 

Pero volvamos a lo que nos interesa: el trato hacia la infancia y sus funcionarios reciclados que dan muestra de su obsolescencia una vez más a comienzos de esta década, demostrando que una nueva dependencia como lo es la primer Defensoría Nacional de Niñez y Adolescencia conducida por los mismo de siempre no hace otra cosa que perpetuar la idiosincrasia de una clase política a la que la ciudadanía dice basta...

Y nosotros desde aquí, la evolución del ciberespacio en metaverso, en la cual consultoras ya están aprendiendo sobre su uso para vender este producto a la clase dirigencial y de esta manera perpetuar la brecha entre dirigentes y dirigidos, reclamando un trato digno a la infancia para poder ofrecer a la sociedad un gestión diferente a la conocida, no por participar de reuniones y obedecer a los eruditos de salón sino por haber vivido la situación "paria" de la infancia y conocer la desidia de la clase dirigencial palaciega que ya sus palabras no logran convencer a nadie. 

Otra vez suena "que se vayan todos"... ¿lograremos al menos sacar a los funcionarios que tanto hacen mal a la infancia?