Una Cultura para cambiar

Si tengo que pensar cómo puede hacer un simple ciudadano para tener acceso a una protección institucional acorde en tiempo y requerimientos que puede tener el caso en cuestión me quedo reflexionando cómo podría ser entrando al misterioso mundo de las conjeturas y probabilidades de cuán en serio se tomen los derechos de infancia en el ámnito local.

Ahora bien, si dejamos de lado lo local para pasar a lo zonal el vocabulario y la militancia cambian como así también el grado de injerencia y cobertura. A modo de ejemplo podemos imaginarnos a un niño del partido de Merlo, uno de los municipios mas reacios a reconocer derechos a los infantes. En este caso cualquier intervención reclamando al municipio será en vano como ya pudimos evidenciar y por ello pasamos al zonal donde nos comunican de la autonomía local y que no pueden hacer otra cosa que informar a la provincia del caso en cuestión... ¿Cuanto tiempo puede pasar?...mucho.

Pongamos otro ejemplo. Tal es el de haber pasado las instancias anteriores y presentarse ante autoridades nacionales donde el panorama es mas sombrío, pudiendo presenciar como un funcionario se excusa dandote clases de historia, de abordaje académico y de consejos personales pero del caso en cuestión lamentablemente no puede hacer nada.

Legalmente presentamos a la justicia tal como menciona la ley 13298 la pronta intervención allá por el 2008 nuestro caso en donde se mando una notificación al municipio que sirvió solamente como constancia de que quien les escribe es el primer ciudadano en la historia de la ley en presentar una denuncia a un municipio por abandono de chicos.

No quedando conforme elevamos un pedido a la ONU de cual no tuvimos respuestas y nuestro caso continúa hasta nuestros dias. Donde nosotros como ciudadanos cumplimentamos el ejercicio de la ley al hacernos cargo como demandantes ante el Estado y como primera linea de contención de las vulnerabilidades de los derechos de los chicos, historia que ha sido relatada con las consecuencias ya escritas que forman parte de la historia de la infancia bonaerense.

Ellos no cortan calles, no hacen piquetes, hasta el momento no votan y menos tienen un día específico para manifestar su orgullo mostrando los avances de una ley que pocos tienen en cuenta...

Mientras sigamos condicionados por el grado de "iluminación"  que tenga el funcionario de turno en cuestión a nuestro caso, su cultura organizacional para manejarse con otras esferas, el interés de su gobierno local en políticas de infancia y uns estructura institucional que en la historia aún no ha marcado el rumbo hacia donde va; estamos sometidos a una justicia que en el mejor de los casos pueda llegar a acelerarse si tiene repercución mediática...

¿Somos rehénes de la Justicia? ¿quién protege los derechos de los niños? | El Sindical.com.ar