Composición tema: La vaca

Así evoco cuando ingresé a la primaria y desde allí comenzaron a darme instrucción EL ESTADO y MI FAMILIA. El ESTADO y Mi FAMILIA me enseñaron algo sobre justicia social y es así que fuí catequista y mas tarde MILITANTE PERONISTA. Como todo militante hay que pagar derecho de piso y ser "usados" por personas inescrupulosas que denostan poder.

No obstante, la voluntad por hacer algo en beneficio de la sociedad continuaba allí, y te golpeas una, dos, mil... cien mil veces por la construcción de un pais justo y soberano y te encontabas con una traba que no te dejaba anhelar algo como lo hicieron nuestros viejos: "EL ASCENSO SOCIAL".

A medida que continuaba mis estudios mi vocación se hacía mas fuerte, y es así que ves como gente que vende mercadería del Estado llega a espacios privilegiados dentro del gran Leviathan, gente del ejercito de reserva que se devoran entre ellos por las migajas que arroja el Estado.

Continuaron mis estudios y me dia cuenta de un hermoso campo de estudio que es el de la investigación social, pero había elegido la carrera incorrecta... Será designios del capricho de mi mente entender la economía como madre ciencia y no entender que la economía era una rama social.

Las ofertas laborales me alejaban de lo que realmente sentía que era mi vocación y comencé a elegir trabajos de bajo sueldo pero estaba constantemente en contacto con la sociedad, es así que tuve la oportunidad de recorrer JC Paz, Malvinas Argentinas, San Miguel y por supuesto Moreno, no sé porque Moreno estuvo en tres oportunidades, cosa que con el resto no pasó.

Estuve en el Area de Economía y Hacienda bajo las órdenes de la Licenciada Laura Bonamico; luego estuve como presidente de una Asociación Civil que nos encargábamos de dar clase de Apoyo Escolar en barrios como Santa Paula, Trujui, Villanueva III y otros que no recuerdo; y ésta, mi última incursión en Moreno desarrollando una temática de la Ley 13298.

El ESTADO y Mi FAMILIA, palabras que hoy evocan cualquier interpretación para cada una de las personas.

Es así que con la crisis del 2001 el Estado comenzó a volcar la crisis en la Familia argentina, y la crisis de la Familia argentina comenzó a volcarla sobre las generaciones mas jóvenes.

Luego de alejarme de mi vocación política el Estado le dió a mi Familia dinero con la famosa compensación de la quita del 13 por ciento a estatales. Ahí decidí comenzar a ser comerciante y tuve la oportunidad de alquilar una casa sobre Colectora Gaona en el partido de Moreno.

A partir de ese entonces mi socio y yo comenzamos poniendo una parrilla y tuvimos un comienzo muy duro, pero la voluntad de crecer no cedía y comenzamos a repuntar con las ventas. Es justo allí cuando se me cruzan dos hermanitas muy simpáticas, pero desnutridas y con síntomas de excesos en estupefacientes. Comencé a interiorizarme en el caso de aquella familia y conocí una historia muy dura y dolorosa que podía terminar muy mal si no daba intervención.

Pensé que podía solo, que era cuestión de plantear un sinceramiento frontal así ellos retroalimentaban sus virtudes positivas y puedan desarrollarse como familia. Pero no, la situación se ponía muy tensa y es que entonces comencé a ver que mecanismos legales había sobre esta cuestión.

Es así como me topé con la Ley 13298 que data de una profunda serie de marchas y contramarchas para que fuera aprobada y luego de numerosas luchas se logró. Comencé a interiorizarme sobre la profundidad doctrinaria que tenía dicha ley y comencé a vislumbrar un marco institucional... pero las palabras eran sólo teoría y en la práctica estaba todo por hacer.

Ya en esa marcha numerosos chicos con diversas problemáticas familiares fueron instalándose al ver como aplicaba la ley a estas hermanitas, entonces decidí elaborar un proyecto donde todos ellos tengan trabajo y ver como un equipo de psicólogos se encargaba sobre la problemática.

Presenté el proyecto al mismo tiempo en el Consejo Deliberante y dentro de la estructura administrativa municipal en la Secretaria de Desarrollo Social y Humano, subsecretaria de Protección Integral de los Derechos de Niñez Adolescencia y Juventud del partido de Moreno, mas específicamente asistí al Programa de Inclusión Juvenil donde los invité a conocer a estas personitas que estaban alejadas de sus hogares y ver como ellos podían restituirlos.

El tiempo se hacía mas tirano y el invierno mas crudo en la vida de estos chicos. Comenzaba a reducir notablemente las ventas y entonces decidí que los niños comenzaran a comer la mercadería que tenía para las ventas. Concurrí nuevamente al municipio pidiendo asistencia alimentaria por lo menos, pero ellos decían que administrativamente no podían. Me desilusionó eso, ya que por mi parte había trabajado en la Subsecretaria de Desarrollo Social de la Municipalidad de San Miguel y casos muchos mas inferiores que éste pudimos desarrollarlos.

Es así que me encontré con un denominado "piquete" en la plaza central de Moreno por gente convocada por ATE que reclamaba otras cosas. No podía dejar de mirar el micrófono que tenía la compañera Susana que propugnaba algunas de las ya clásicas consignas de empleados del Estado, pero no pude resistir la tentación y tomé el micrófono. En mi discurso propugnaba que el municipio de Moreno había firmado un convenio con la Provincia de Buenos Aires en donde se comprometía a resolver en lo inmediato el marco institucional de la ley 13298, y que pedía pronta intervención para los niños que estaban conmigo en ese momento. A los pocos días me enteré de una reunión en el CPO (hasta el día de la fecha todos me dieron una explicación de lo que era y quizá mi inteligencia no ha logrado todavía resolver qué es y qué es lo que hace).

Al comentar mi problema los compañeros de ATE se ofrecieron a ayudarme y ahí conocí lo que era el Foro por los Derechos de la Niñez, adolescencia u Juventud del partido de Moreno. Comencé a ir a numerosas reuniones donde todos los oradores exponían los diversos grados de conflictividad como así también la profundidad intrínseca de la ley 13298. Gracias a ATE Moreno tuve acceso a una computadora con Internet, mientras que la parrilla estaba completamente en bancarrota.

Los chicos que trabajaban ponían parte de sus ingresos para reflotar las ventas, pero el invierno era tan crudo que nos recluímos en la casa y a elaborar sandwichs y empanadas...Otra vez en bancarrota...

Mis notas y pedidos comenzaron a ser mas frecuentes a través de la red electrónica: Desarrollo Humano de la Provincia de Buenos Aires, Desarrollo Social de la Nación, Ministerio del Interior, Ministerio de Justicia, Secretaria de la Infancia del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Gobierno de la Provincia de Buenos Aires, el principal diputado nacional del partido de Moreno y a numerosas instituciones que se encargan sobre la problemática de niñez. Hasta el Consejo del Partido Peronista Bonaerense.

Los días iban pasando y los dos grandes miembros de la sociedad: EL ESTADO y MI FAMILIA, estaban ausentes. Ya por esos tiempos las hermanitas habían conseguido trabajar ayudando a su bisabuela que estaba internada en un hospital y solo de los varones que quedaba quien había ingresado desde sus comienzos con un trabajo estable. por entonces no había problema monetarios salvo yo, que empecinado y bajo la propuesta que se me podía asistir con mercadería y un Plan Jefes y Jefas de Hogar podía seguir con el proyecto, podía alquilar la parrilla y podía ayudar a estos jóvenes.

El alquiler de al parrilla es todo un enigma, la asistencia de mercadería y el Plan Jefes y Jefas de Hogar no apareció, la señora internada fallece y el único que tenía trabajo estable dejaba de tenerlo...Otra vez en bancarrota.

Por el Club de la Colina (el proyecto innovador en sus principios pero que nunca llegó a concretarse) pasaron numerosos adolescentes que manifiestan la plena libertad de uso y goce de sus derechos, pasaron en su gran mayoría gente de clase media y todos ellos con algún grado de instrucción escolar. Hoy, aquel proyecto está en crisis y veremos que sucede en esta etapa del proyecto.